10/28/2011

Fin de un verano intensamente largo







Hay dias, fines de semana, que se graban en tu corazón. El del 14 de Octubre es de esos que me llevo y que me reconcilian con la humanidad. Con mi chica el viernes por la mañana nos dirigimos a San José, en Cabo de Gata, en una mañana luminosa de mar dorado y azul, con un objetivo claro y meridiano: ver a Sefronia en su concierto de despedida temporal de los escenarios. Sefronia, una banda que no ha tenido el reconocimiento que se merece en nuestro país, por mor de los mercaderes y los modos de vida y dinero que presiden la industria, Radio 3 incluída, (quien lo diría qué vergüenza).






Sefronia creó su obra maestra en 2010 "Tres", un disco que enviaría en una nave espacial Voyager, junto con una paletilla de bellota y un Sorolla. No necesitaría más para explicar a un alienígena en qué consiste España. Sin embargo, la información excedería del contenido "España". "Tres" encierra el alfa y el omega de la música contemporánea del siglo XX y XXI, la contiene entera y entera la derriba, para con sus despojos, componer un paisaje lleno de paradojas, aciertos y eclosiones múltiples, disparos a la multitud en todas direcciones, espejos deformados, cuencos llenos de luz y hongos amarillentos... y miradas también, dentro de uno mismo.





Parece como aquel cuento de Bradbury en que un granjero exponía a sus vecinos un tarro enorme con "algo" dentro, que nadie sabía identificar plenamente pero que en cada profundo interior encendía alguna llama, esta vez sí, perfectamente reconocible, haciendo aflorar las lágrimas de los espectadores.






Por si fuera poco, Antonio Luis Guillén, con dedicación y esfuerzo descomunales, ha construído el disco más grande editado en territorio español, cuya producción hace palidecer las mercancías habituales españolas, y que epata y supera con creces en cuanto a riqueza, buen gusto y elegancia a cualquier producción internacional contemporánea. Este jodido sabe qué botones hay que tocar!

Y lo más vergonzante para el sector: todo ha sido construído y pensado en una pequeña habitación de una vivienda en la luminosa Almería, junto al mar... Una producción casera! qué escandalo! Pues sí, pues sí. A ver si aprenden algunos gurús de oídos de madera.

Como decía el viernes aterrizamos en la Isleta del Moro donde comimos un arroz con el mar salpicando casi nuestros pies con Nadia y Fernando y la cachorrita Pipa... Poca gente me da tanta paz y me provoca tantos buenos sentimientos como estos dos, en verdad. Es como si tuvieran una estrella dentro cada uno brillando y cuando los ves juntos multiplican su brillo por... no sé ni el número...


Por la noche llegó el momento esperado, la oscuridad, las notas, la voz de Angelina colmadora de almas, los susurros entre canción y canción, Nadia salvando a Antonio de los precipicios a los que se asoma siempre, la hierba fresca y los árboles, y Juanjo y Ginés, los dos complementos necesarios a mi entender para la plenitud del directo de Sefronia y el desarrollo completo de su ultimo disco "Pléroma" y mucho más. "Pléroma" es la ultima grabación de Sefronia, un directo en su integridad, una especie de "Tres" desnudo que suena a intenso y respirado, a " chavalotes, también lo sabemos hacer para oídos sencillos". Sentado con mi gente, mi Mª Luz, Paco, María, Javier...


Y el después del concierto, los besos, los abrazos, las copas, las risas y el manual de como asomar a la Estancia del Abandono a un cámara de Canal Sur borracho. Ay! Fernandico!


Y al día siguiente, el jardín botánico de Rodalquilar charlando con Paco sobre mi descubrimiento de la luz del desierto y las tapas de atún fresco y la comida en los Escullos, con Paco, María, Antonio, Angelina con Manuel dentro vibrando y Angelina pequeña como dicen mis hijos...


El verano ha terminado tan tarde y tan intensamente...