9/29/2024

MICROBROMAS MICROINCOHERENCIAS MICROINFARTOS

 


Claro claro, claro! Ahora que la Inteligencia Artificial vuelve morena del verano y  con mucho más conocimiento, me pregunto si en un futuro muy cercano habrá humanos que sepan distinguir noticias falsas generadas por la IA de las que tengan la condición de auténticas.

SI, me aventuro a proclamar, pero serán los viejos los que las sepan distinguir (meted a la gente de mi edad si queréis en este concepto que no me afecta). Los viejos, que hayan estado atentos a la Historia y a la vida. Los que estaban pendientes durante su juventud y madurez de Peret, el fútbol, la revista HOLA y las boîtes, no precisamente.

Pues bien, quizás aquellos que sepan detectar las microincoherencias de la IA y discernir lo cierto de lo que no es con precisión y argumentos, puede que vuelvan a recuperar el papel que la vejez tuvo antaño como depósito de experiencia, sabiduría y conocimiento. Fuentes a donde recurrir en el caso de conflicto vital. Los hechiceros de la tribu.

Os imagináis una vida en la que os envidiaron por ser jóvenes y luego por ser viejos? Que vuelco del destino tan maravilloso, donde la verdad sólo se encuentre en los libros publicados en el Siglo XX y en los viejos documentales y las películas en blanco y negro…

Llamadlo nostalgia, cabreo o querer  seguir ocupando un puesto privilegiado en los días venideros. Pero… PUEDE OCURRIR.

Y siempre habrá una mano para desenchufar la máquina que no va… aunque de esto no estoy tan seguro.

1/26/2021

Mount Wittenberg

 

Vamos a recoger a Martina de las clases de alemán a las afueras de la ciudad. Gabriela espera ese momento de la semana con ilusión. Es media hora juntos   oyendo música, riendo y hablando de cualquier cosa.

En el coche, en la primera calle que pisamos del camino, me pide poner la música ella y yo, a mi vez le pido poner primero una canción de un disco que me he encontrado descargado entre otros archivos y fuera de lugar, y , por tanto, olvidado. Seguramente lo bajé en algún momento y quedó sepultado entre carpetas de color amarillo viejo, entre grabaciones y pruebas para el segundo disco de Punk Buró. El caso es que lo descomprimo y me encuentro con un disco de Dirty Projectors, una banda de cierta avant garde que me gusta mucho desde que escuché “swing Lo Magellan” (ese es el motivo de la descarga en su dia, seguramente), titulado “Mount Wittenberg Orca + Bjork”. De 2010. El título no puede ser más extraño… Orca? Bjork? Bjork con Dirty Projectors? Bueno, bien pensado ambos juegan en el filo de la navaja por donde tantas veces me paseo, por lo que no tiene nada de extraño que hayan grabado algo juntos.

Pongo la segunda canción, “On and Ever Onward”, una grabación sencilla, como todo el disco, con una instrumentación desprovista de artefactos pero calibradísimo en cuanto a voces, maravillosos juegos,  voces muy parecidas a las suyas, y también un disco muy, muy, loco y divertido y muy libre. Como ellas. Gabriela queda absorta con la canción, cuando termina le digo : “pon las tuyas” pero renuncia a su opción y seguimos escuchando este disco mágico durante el trayecto ….

Al recoger a Martina, no le decimos nada y ponemos “Sharing Orb”… se queda sobrecogida y en silencio unos segundos y en seguida reconoce a Bjork, (no por su nombre, esa es la maldición de los modos de consumo actuales)  pero aprecia algo más detrás y pregunta.

Volvemos en silencio a casa, escuchando el disco entero. Terminamos la ultima canción con el coche parado en la puerta de la cochera.

“Me se sartan” las lágrimas, papá- dice Martina…. Y yo sé que es verdad, pero intenta quitarle con esa expresión gravedad al asunto, aunque sé que algo se ha movido con intensidad en su corazón.  En el de las dos.




   

7/15/2020

Ya no fumamos , cabrón!?

Abandonada como una vieja botella de whisky, vieja por seca, inútil y destinada a la basura la red social por excelencia, la Tribuna de los Mediocres, de nombre que no quiero decir, vuelvo a ésta, la  Su Tribuna de Los Mediocres Superiores en la que el mensaje ha de ser necesariamente superior, más violento y sincero de contenido, dibujo de tema libre y atrabiliario si acaso, pero dentro de un patio que solo riega UNO, poco visitado y con maleza, pero la maleza de UNO. Donde manda. Y es de gusto este sitio solitario. Y silencioso. 
 
La cuestión que arde en estos días no es otra sino la pandemia, la saturación por pandemia y la pandemia de saturación. Las teorias sobre la conspiración son multiversales y saben con distintos gustos,  pero en general, más allá de microchips insertos de tamaños imposibles, orientales con cara de malotes haciéndose los inocentes y bellezas magyares en contoneo bombástico, si creo percibir una sombra, una sombra estatal que como un ojo lo vigila todo, señalando al que se rebela contra la máscara de estúpido uso en la via pública y desenmascaramientos múltiples en los bares de noche.
 
Es tan fácil señalar al rebelde....decidí esta mañana no llevar la máscara por la calle hasta llegar a mi trabajo donde tampoco la uso salvo a requerimiento de terceros y en el camino hallé un coche de la reputada Policía Local, uno de los órganos más chulescos de los que nos ha otorgado la democracia y, a su vista, con desazón y desasosiego creado, me puse la máscara para desprenderme de ella metros mas allá, a salvo de sus vigilancias españolas. Entiendo que por la calle y en tránsito no hay lugar a la máscara, porque no hay lugar al contagio, pero nuestro elegante gobierno de la comunidad parece entender que sí. Y se impone con miedo, que eso se entiende de puta madre en España. 
 
 
Y la gente obedece, muy obedece. Son estos pequeños ensayos para algo más grande que ha de venir más adelante? Podrán con nosotros en ese caso? Doblegarán a la marca nacional de la rebeldía por naturaleza?
 
Y fumar... qué gran excepción....me apetece ir con un cigarrillo encendido entre los labios todo el santo dia… sería como en las películas de ciencia ficción en las que la Bestia no distingue al enemigo humano porque va desnudo....
 
Que Vd. fuma? ahhh, pase, pase... adelante!
 
Y otra: no compraré un periódico mas en varios meses, qué aburrisión, qué colección de necedades, qué desastre moral y rémora de la humanidad.
 
Por no hablar de la demolición sistémica de nuestra endeble economía de planeta Trántor….. es necesario reinventarse en este país de camareros... pero quién nos dará el norte?
 
Sólo veo el pequeño pero colosal fracaso del sistema capitalista que es incapaz de asimilar esta enfermedad porque NO HAY hospitales suficientes ni medios, ni recursos humanos para afrontar un contagio masivo....este es el fracaso del mundo tal como lo entendíamos, del reparto de los bienes y de la asignaciones presupuestarias. LA consecuencia de dar la espalda a lo verdaderamente importante: las personas.
 
En fin, demasiadas variables abiertas. Demasiada corriente.
 
 

choch

Eso mismo

8/29/2016

Encuentro inesperado


" Al eminente artista Don José Carazo con cuya amistad me honro, dedica este recuerdo con sombrero y todo, su apasionado amigo que le quiere mucho, Enrique Sanchez." 

A veces el destino da giros en espiral, respirando de forma afanosa en los recovecos del cerounocerouno como un ratón en un laberinto...

Lo que no sabían D. Enrique y D. José a primeros de siglo XX, fecha por la que debe rondar este daguerrotipo, es que un sobrino del primero y una hija del segundo se conocerían en 1960, casándose posteriormente en la iglesia de la calle San Matías, fruto de cuyo unión es éste que escribe hoy estas letras. 


7/04/2014

Salvajemente Amateur 2014 Décima Edición. Circulos que no se cierran

Claro que este año ha sido diferente, totalmente diferente. Es más, ningún año se ha parecido a otro. El núcleo, lejos de cerrarse, se abre y se lo traga todo como un agujero negro de leche condensada y pellizcos inconscientes.

Aprecio lo recibido, que se incorpora a lo construído, pero advierto más que nunca el sentimiento, el sentimiento hondo y místico que nos procura esta "pequeña comunidad anarquista de sotomonte", de autosuficiencia y gestión colectiva. 

Los pequeños rituales, el abrazo de los todos, las miradas cómplices de los enamorados, las sillas vacías que sabemos ocupadas en la distancia, las mínimas claves compartidas convergen en la cosmogonía utilitaria de Salvajemente Amateur, no necesitamos más. Nos sabemos juntos y nos sentimos, mirad el moderno celuloide, lo refleja todo: el ánimo, la risa, los secretos y el aire mismo entre los chopos.

Nunca estaremos más cerca de Proudhon que en estos días...

8/09/2013

Como un conejito en una nube...

Cabaret Popescu ha vuelto para aliviar los huérfanos de gracia,  a los que no tienen nada salvo su propia desgana,  para aguijonear a los príncipes de la desidia y la tensión baja, a los lugartenientes de la paz burguesa y duradera.
Está anocheciendo y llegas a un anfiteatro en el que caen las ultimas luces del ocaso y las primeras  de la ciudad.
Comienzan las  notas de la canción y empiezas a percibir una sensación desconocida para  los burgueses  de clase media: no has visto nada como esto  en tu vida…
Y te sientes afortunado de estar allí, parece que son ellos los que te han elegido, los que han venido a verte. Estás dentro y el espectáculo te rodea y casi no puedes respirar, los momentos absolutamente geniales te van dando en la cara una y otra vez, no puede ser verdad, no puede ser tan bueno, las canciones y los números van y vienen en un torbellino, y tu risa, tu sorpresa y  tu entusiasmo se asoman a tu alma de una manera que ya creías olvidada.
Está todo ahí y te lo dan en arte desplegado como un pop-up: el norte y el sur, el cono y el polo, la implosión y la explosión, el crudo y el quemado de pitón a rabo.
Y encima cenando gloria bendita….
Y te quedas con ganas de repetir.
Como yo, como nosotros.


Y volveremos… 

4/10/2013

Restos de permanencia

Días tristes. De pérdida y enfermedades.
La muerte como idea de transición es la que debiera presidirme, pero no puedo evitar mi condición mamífera de apego al mundo, de arraigo a la carne, a los sueños, a la prevalencia del amor sobre todas las cosas. 
Y los amigos van cayendo, atrapados detrás de la frontera. No somos niños desde luego, pero detecto injusticias abundantes a mi alrededor. Gente buena a la que no le tocaba, ni por edad ni por riesgos, están empezando a cerrar el circuito de la vida y volviendo al lugar de donde vinieron. Ponle tú el nombre.
Y es inevitable pensar en uno mismo y lo mal que me vendría ahora emprender ese viaje con tantas cosas como tengo pendientes. Llego hasta envidiar esa despedida que hacia los alfas y los betas y los demás en la novela de Huxley: en cama impoluta, con ochenta años aparentando treinta, apagándose, drogados hasta las cejas, llevados en pantallas de paisajes...

Sin embargo no es el viaje lo que me embarga, sino la sensación de vacío propia
y el conocimiento del vértigo que deben de sentir los más allegados.

Y el sufrimiento, el tener que morir como un perro...