Una noche de diciembre

La música, frente al resto de las artes, es la única que se diluye en una sucesión formando un todo que debes articular en tu mente para poder enjaretarlo. Es trabajo, dolor, ilusión y... finalmente magia.

Esta noche de Diciembre ha habido varios momentos mágicos e inesperados, de los que te hacen agradecer tu presencia en el suelo. Cuando Juanmy Maldonado me envió un sms anunciandome que no podía asistir al Salvaje se nos cayeron los palos del sombrajo ciertamente... llevábamos dos canciones preparadas solamente y en una de ellas su participación era capital... Chilam me dijo: " no tocamos esa", pero amaneció el "y si...?", y resolví tocar la guitarra junto con Chema para acompañar a Carolina en "In a between Days". La canción, tocada por Juanmi llevaba una pequeña introducción de algo parecido a música de honky tonk para luego entrar en los acordes archiconocidos del tema.

"¿ Y si... tocamos "Remeros" como introducción le dije a Chema ? "Remeros" es una vieja chalaúra que hicimos juntos en 1985 aproximadamente y que consiste en dos guitarras arpegiadas que, compartiendo las mismas notas aproximadas, consiguen un efecto atonal francamente desasosegante. "No, no" me respondió asustado...

Que no? Vamos allá. Lo hicimos chirriando los tímpanos occidentales del público (Cosmo hubiera disfrutado aquí) y cogiendo finalmente el La Mayor con el que se inicia el tema. Inesperada magia, inspiración inmediata y maravillosa, plenitud, la voz de Carolina y la banda y el ruido de fin de siglo, ese ruido tremendo y tribal.

Y amor sobre todas las cosas...